Varios minoristas del Reino Unido se comprometen a prohibir la venta de toallitas que contengan plástico en un esfuerzo por reducir los residuos no biodegradables y resolver los problemas de alcantarillado que, según ellos, son causados por un enjuague incorrecto, una medida que los interesados de la industria de las toallitas temen que pueda tener consecuencias negativas. En cambio, estas asociaciones consideran que los fabricantes y minoristas de toallitas deberían centrarse en un etiquetado adecuado y en aumentar la educación de los consumidores para resolver los problemas asociados con las toallitas.

En abril, Boots se convirtió en el último minorista en anunciar un plan para dejar de vender toallitas a base de plástico, uniéndose a otros como Tesco y Aldi. Estos esfuerzos podrían afectar a las toallitas para bebés fabricadas por conglomerados internacionales como Procter & Gamble y Huggies.